Disruptores de hormonas son sustancias químicas y alimentos que alteran al sistema endocrino.
Cualquier tipo de harina y azúcar puede provocar estos desequilibrios. Si comes azúcar, producirás más insulina, más estrógeno y más testosterona. Así también los lácteos y el gluten que suelen desencadenar inflamaciones y desequilibrios hormonal.
El azúcar, la cafeína, el alcohol, el estrés y la falta de ejercicio contribuyen a empeorar el síndrome premenstrual y todos los desequilibrios hormonales, incluida la menopausia.
Por otro lado los xenobióticos o productos químicos ambientales como los pesticidas presentes en nuestros alimentos que pueden actuar como potentes disruptores hormonales y desencadenar el desequilibrio de nuestras propias hormonas. Así también los plásticos a los que estamos expuestos a diario.
Qué podemos hacer? Comer una dieta integral, real, no procesada, orgánica, mayormente basada en plantas, con productos animales orgánicos. Eliminar los plásticos, pesticidas y detergentes que no son orgánicos.
Tomar medidas sencillas como elegir alimentos orgánicos y beber agua filtrada puede tener un gran impacto en el equilibrio hormonal.
Dormir bien todas las noches y hacer ejercicio regularmente puede ayudar a equilibrar tus hormonas. Junto con los suplementos de Omega-3, vitamina D3, vitaminas B, magnesio y probióticos.